Es muy posible que hayas escuchado hablar en alguna que otra ocasión sobre esta extraña palabreja: Antropometría. En este artículo vamos a definir qué es y por qué es una forma más efectiva de medir nuestro estado corporal en comparación con la medida del peso.
¿Qué es la antropometría o estudio antropométrico?
El estudio antropométrico o antropometría es una evaluación de la composición corporal. Generalmente, cuando queremos medir nuestros progresos al hacer una dieta, lo que hacemos es pesarnos.
Sin embargo, sabemos que el peso es una medida inexacta y poco fiable. Mediante un análisis antropometrico podemos obtener datos cómo nuestra cantidad o porcentaje de masa muscular y la masa grasa, o el porcentaje de grasa corporal que tenemos en el cuerpo humano.
Antropometría: definición
La definición de antropometría reune el conjunto de medidas de referencia que tenemos en cuenta a la hora hacer un análisis corporal: Perímetros y pliegues, índices corporales, altura, IMC, composición hidraúlica, metabolismo basal, étc.
Antropometría y ergometría
Algunas personas confunden el concepto de antropometría con el ergonometría y aunque pueden encontrarse relacionados, no son lo mismo.
La ergometría es lo que popularmente conocemos como prueba de esfuerzo. Consiste en comprobar el rendimiento de nuestro corazón (electrocardiograma) cuando somos sometidos a un esfuerzo físico de nivel medio.
Antroprometría nutricional
La antropometría nutricional no es más qué un análisis antropometrico del que vamos a poder extraer conclusiones para posteriormente modificar una dieta o estilo de alimentación.
Por ejemplo, si tras un estudio antropométrico nos sale un índice de grasa corporal por encima de los rangos de salud establecidos, debemos comenzar una dieta que sea hipocalórica hasta establecernos en un rango de grasa corporal adecuado.
Cómo se mide la grasa corporal
La masa grasa en los humanos se divide en dos secciones: La grasa corporal visceral y la grasa corporal subcutánea. La Rosa corporal visceral es el típico “michelín” qué podemos pedir pellizarnos, mientras que la grasa corporal subcutánea es la grasa que se encuentra entre los tejidos orgánicos.
La grasa corporal subcutánea no es apreciable físicamente. Cuando comenzamos un proceso de adelgazamiento, lo habitual es que progresivamente vaya disminuyendo el porcentaje de grasa corporal visceral, y quizás, la grasa corporal subcutánea.
Mediante un estudio antropométrico también podremos saber la distribución de la grasa en nuestro cuerpo.
Tablas antropométricas en España
Las tablas antropométricas nos sirven para establecer unos valores de corte para determinadas poblaciones a través de la curva de la normal.
A continuación, te dejo por aquí el enlace a varios estudios de investigación publicados por mapfre acerca de las tablas antropométricas para España, con datos y una explicación acerca de como se construyen dichas tablas en base a las dimensiones del cuerpo.
¿Para qué sirve la cienantropometría?
La cineantropometría está relacionada con el analisis antropometrico, de cara a conocer la composición corporal y determinar qué necesidades fisiológicas y nutricionales son necesarias de cara, generalmente, a cambiar el rendimiento deportivo.
Esto no es aplicable únicamente para deportistas de élite, el sedentarismo y la falta de actividad física es algo preocupante en cualquier caso.
En ocasiones, nuestra composición corporal no es la más adecuada para movernos o hacer ejercicio, mediante un estudio antropometrico conoceremos el balance entre nuestra grasa corporal y nuestra masa muscular.
La conclusión es evidente, si tenemos más grasa corporal de la recomendada y un índice de masa muscular muy bajo, nuestra capacidad motora, así como nuestra salud, se encontrarán mermadas.
Sobre la masa muscular.
Hay muchas razones por las que es posible que sea necesario aumentar nuestra masa muscular. Por ejemplo, en el caso de aquellas personas que por razones estéticas quieren encontrarse más musculados o musculadas.
Pero también, en el caso de muchos deportistas es necesario conocer la cantidad de masa muscular localizada, ya que es posible qué aumentar esta ayude al deportista a protegerse de lesiones.
¿Para qué sirven las mediciones antropométricas?
Uno de los grandes errores las personas que quieren adelgazar, consiste en ponerse hacer ejercicios cardiovasculares como locos, olvidándose del trabajo con cargas o pesos.
Cuánto mayor sea nuestra masa muscular, más rápido bajaremos nuestros índices de grasa corporal. La razón de esto es, que al tener más músculo en nuestro cuerpo, también aumenta nuestro metabolismo basal y por tanto, consumimos muchas más calorías para el mismo movimiento.
Por esta razón, las mediciones antropométricas nos sirven no sólo para mirar si hemos perdido grasa, si no para saber si hemos subido de masa muscular.
Antropometría deportiva
Los nutricionistas deportivos nos encargamos de hacer antropometrías deportivas y estudios de rendimiento, como una forma de evaluación y diagnóstico previo a la hora de determinar cómo debe ser la nueva alimentación de la persona.
¿Quién se encarga de hacer una antropometría deportiva? Generalmente, la puede hacer bien un médico, un nutricionista o un experto/a en ciencias del deporte. Si quieres saber más sobre nutrición deportiva aquí puedes leer algunos libros gratis.
Tenemos que tener en cuenta, que tener más masa muscular no siempre significa tener un mayor volumen corporal o dimensiones corporales. El músculo tiene diferentes tipos de fibras y depende cual se estimulemos esto, se traducirá en una mayor definición muscular, fuerza, potencia y volumen muscular.
Muchas personas que quieren adelgazar tienes miedo hacer ejercicio con peso, ante el temor de “ponerse muy fuertes”, sin embargo, esto no funciona así.
Si quieres perder peso en Madrid, nosotros podemos ayudarte cómo nutricionistas-dietistas.
¿Cómo se toman medidas antropometricas?
Existen diferentes maneras de tomar medidas antropométricas. Una de las más frecuentes y de carácter manual, es medir los pliegues corporales. Esto suele llevarse a cabo con un instrumento llamado plicómetro, el cual no sirve para medir la dimensión de algunas partes de nuestro cuerpo.
Este instrumento lo que hace es medir la dimensión de nuestros pliegues cutáneos. Es una forma de obtener mediciones, que aunque pueda parecer rudimentaria, es bastante concisa y económica.
Aquí te dejo un ejemplo:
Las básculas de bioimpedancia
Si no te ves calculando tus pliegues cutáneos y prefieres algo más cómodo, lo habitual es recurrir a una báscula.
Personalmente, yo trabajo con básculas de bioimpedancia. La típica báscula de baño u hogar no sirve, ya que son de todo menos una ciencia exacta.
La razón de que esto sea así, es que estás básculas además de estar mal calibradas, es que tan solo nos ofrecen el dato del peso. El peso es normal que oscile entre 1 kg y 2 a lo largo de un mismo día. Esto se debe a que nos inflamamos, a cambios hormonales, a cambios en la composición hidraúlica u otros.
Si queremos hacer una correcta medición, necesitamos una báscula de este tipo. No obstante, cuidado con adquirir una muy barata, ya que estás, aparentemente te ofrecen datos de la composición corporal, sin embargo, lo que hacen es en base a estadísticas, ofrecer una estimación.
Es decir, en realidad no llevan a cabo un análisis corporal ya que no cuentan con la función de evaluar la conductancia de la piel.
Si estás pensando comprar una, te dejo aquí abajo la que yo utilizo. Bajo mi punto de vista, es la mejor opción que hay en relación calidad precio.
Es fácil que nos engañen, ya que las otras además de ser más baratas, suelen ser también bastante estéticas. Sin embargo, ya te digo, qué estás no te servirán para más que tener una idea aproximada de tu peso.
Las básculas más caras o profesionales, además nos darán una información sobre la distribución de la grasa en las partes de nuestro cuerpo. Bajo mi punto de vista, para uso propio y en relación calidad precio, cogería esta:
Referencias bibliográficas:
Lescay, R. N., Becerra, A. A., & González, A. H. (2017). Antropometría. Análisis comparativo de las tecnologías para la captación de las dimensiones antropométricas. Revista EIA, 13(26), 47-59.
Portao, J., Bescós, R., Irurtia, A., Cacciatori, E., & Vallejo, L. (2009). Valoración de la grasa corporal en jóvenes físicamente activos: antropometría vs bioimpedancia. Nutrición hospitalaria, 24(5), 529-534.