A veces el entrenamiento deportivo está orientado a un cambio estético o de imagen. Que el objetivo este colocado aquí, no implica que sea igualmente importante trabajar la alimentación en relación al entrenamiento.
Como imagino sabrás, no podemos comer igual si nuestro objetivo es adelgazar, si lo es definir, o si por el contrario es aumentar de volumen o masa muscular.
La figura del técnico nutricionista deportivo en estos casos sirve para optimizar los resultados y evitar la frustración. De nada sirve matarse en el gymnasio si no tienes en cuenta la alimentación.
Bueno, no es cierto que no sirva de nada. Pero sí que es verdad que se estima que la alimentación ocupa aproximadamente el 70% de importancia en un cambio corporal.
Y no sólo eso, de forma natural, llega un momento en que se produce estancamiento. Por más que entrenamos, no conseguimos quemar más grasa o generar más masa muscular.
También hay casos de personas que por su constitución, por ejemplo, les cuesta mucho ensanchar. En estos casos, o tenemos en cuenta la parte nutricional, o el objetivo se alcanzará de forma extremadamente lenta por mucha mancuerna que levantemos.
A veces puede ser recomendable la utilización de suplementos nutricionales.