¿Cómo tener una relación estable y duradera?

En el laberinto del amor y las relaciones, encontrar y mantener una relación estable y duradera puede parecer un desafío monumental. En un mundo donde las relaciones efímeras y los encuentros casuales son cada vez más comunes, ¿cómo podemos cultivar una relación que no solo sobreviva, sino que prospere con el paso del tiempo?

En este artículo, vamos a explorar este tema desde la perspectiva de la psicología, proporcionando una guía basada en la ciencia y la investigación para ayudarte a construir una relación que sea tan duradera como satisfactoria. Ya sea que estés en una relación y busques fortalecerla, o si estás soltero y buscas prepararte para tu próxima relación, este artículo te proporcionará las herramientas y los conocimientos que necesitas para tener una relación estable y duradera. Así que, si estás listo para embarcarte en este viaje de descubrimiento y crecimiento, sigue leyendo.

En la era de las relaciones líquidas y los encuentros fugaces, la búsqueda de una relación estable puede parecer un desafío. Sin embargo, la ciencia tiene mucho que decir sobre cómo construir y mantener relaciones duraderas.

¿Qué es una relación estable?

Una relación estable es un término que a menudo escuchamos en conversaciones sobre el amor y las relaciones de pareja, pero ¿qué significa realmente? En el contexto de la psicología, una relación estable se refiere a una unión en la que ambas partes se sienten seguras, respetadas y satisfechas de manera consistente.

Una relación estable no es simplemente una relación libre de conflictos. De hecho, el conflicto es una parte normal y saludable de cualquier relación. Lo que distingue a una relación estable es la forma en que se manejan estos conflictos. En una relación estable, las disputas se resuelven de manera respetuosa y constructiva, y se utilizan como oportunidades para el crecimiento y el aprendizaje mutuo.

Además, en una relación estable, ambas partes se sienten seguras y valoradas. Esto significa que cada persona se siente libre para ser auténtica, para expresar sus pensamientos y sentimientos sin temor a la crítica o al rechazo. También significa que cada persona se siente valorada y apreciada por lo que es, no solo por lo que hace o proporciona en la relación.

Una relación estable también se caracteriza por un sentido de equidad y reciprocidad. Esto significa que ambas partes contribuyen a la relación y reciben beneficios de ella de manera equitativa. No tiene que ser una división exacta del 50/50 en todas las cosas, pero debe haber un sentido general de equilibrio y reciprocidad.

El amor romántico y la química cerebral

Cuando comenzamos a enamorarnos o a sentirnos atraídos por alguien, se activan ciertas áreas de nuestro cerebro. Estas áreas, que son filogenéticamente más antiguas, tienen que ver con el anhelo, la ilusión, la obsesión e incluso la motivación. Mientras tanto, nuestra parte prefrontal, desde donde tomamos decisiones conscientes, queda secuestrada por estos sentimientos intensos.

Este proceso puede llevar a la idealización, donde no vemos a la otra persona como realmente es, sino como queremos que sea. Aunque puede ser evidente para los demás que una relación puede no ser saludable o sostenible, podemos ignorar estas señales debido a nuestra química cerebral.

Cómo mantener una relación estable

Con el tiempo, esta química cerebral intensa disminuye y podemos comenzar a tener otros tipos de sentimientos más similares al amor en lugar de al enamoramiento. En esta fase, comenzamos a ver a la persona más como realmente es.

Un estudio realizado por Match.com con más de 1,100 personas casadas encontró que tener una etapa precompromiso larga era un factor que predecía en gran medida que los matrimonios serían relaciones más felices y estables. De hecho, el 81% de las personas en el estudio dijeron que se volverían a casar con la persona que habían elegido.

Manteniendo la magia en las relaciones a largo plazo

Entonces, ¿qué mantiene la magia en las relaciones a largo plazo? Según la ciencia, hay tres componentes básicos que mantienen el sistema de apareamiento y reproducción humano: el impulso sexual, la novedad y la conexión.

El impulso sexual, o tener sexo regular con tu pareja, aumenta la testosterona y la oxitocina, lo que nos ayuda a sentirnos más unidos a nuestra pareja. La novedad, o compartir nuevas experiencias y estímulos con nuestra pareja, es un precursor de la dopamina, que nos hace sentir más unidos a la persona con la que compartimos estas experiencias. Por último, la conexión, tanto física como emocional, es esencial para mantener el amor y el romanticismo en una relación.

Previniendo la infidelidad

La infidelidad puede ser un desafío en cualquier relación. Aunque nadie está completamente libre de que esto pueda suceder, hay algunas cosas que pueden ser un factor preventivo. Según la psicóloga de pareja Esther Perel, la infidelidad a menudo es una forma de intentar encontrarnos a nosotros mismos en una relación con otra persona. Por lo tanto, es importante cuidar al individuo y no perderse dentro del concepto de pareja.

En resumen, la ciencia tiene mucho que decir sobre cómo construir y mantener relaciones estables. Al entender nuestra química cerebral, dar tiempo a nuestras relaciones y trabajar en mantener la magia, podemos aumentar nuestras posibilidades de tener una relación amorosa duradera.