Despega sin temores: el miedo a volar se puede superar

Cada año que pasa, personas nuevas confiesan tener algún tipo de fobia. Un temor intenso e irracional hacia algo o alguna situación en concreto. En ocasiones éstas permanecen ocultas por vergüenza o pudor, o por miedo a que sean juzgadas. Existen fobias de todo tipo, y algunas son más limitantes que otras, como es el caso de la aerofobia, que es el miedo absoluto a volar en avión.

Aunque pueda parecer que esto afecte la vida de las personas solo en ocasiones puntuales y del todo evitables, como por ejemplo, durante las vacaciones;  la verdad es que puede llegar a ser muy vinculante en ámbitos importantes de la vida como el laboral.

Muchas personas con aerofobia se ven obligadas a viajar en avión por el trabajo que desempeñan, y es entonces cuando la ayuda psicológica que ofrece Buencoco, plataforma de psicología online, se hace necesaria para enseñarnos a gestionar la ansiedad que esta fobia puede llegar a generar. Sin necesidad de acudir a una consulta, simplemente desde el sofá de tu casa. Si eres de los que les sudan las manos solo con oír la palabra avión, quédate leyendo un poquito más porque lo que te vamos a contar te interesa y mucho.

El miedo a volar está estrechamente relacionado con la necesidad de tener el control

Dificultad para respirar, sudoración excesiva, taquicardia, mareos, trastornos gastrointestinales. ¿Te suena? Sí, estos son solo algunos de los síntomas que padecen las personas con aerofobia o aviofobia antes, durante, y después del vuelo. Estas personas lo primero que hacen es evitar coger un avión por miedo a cómo se van a sentir. El problema viene cuando la situación no puede ser evitada por – como comentábamos anteriormente- cuestiones laborales u otros motivos improrrogables. Estas personas normalmente acaban recurriendo a relajantes musculares o ansiolíticos para que la situación sea lo menos dramática posible. Pero, aun así, resulta irremediablemente un mal trago si el problema no se está tratando junto con un profesional.

Y es que, el miedo a volar tiene mucha relación con la sensación de perder el control. Dentro de un avión la situación no puedes manejarla tú, y dependes de otras personas para que el avión llegue a su destino. Esto, que parece una obviedad, resulta verdaderamente angustiante para las personas que padecen este miedo. Suelen ser personas bastante controladoras a las que les gusta tener todo bajo control y que cuando sienten que algo se les escapa de las manos, entra en juego la ansiedad.

Pero, ¿cómo se siente realmente una persona con aerofobia cuando sube a un avión?

Desde fuera, parece complejo comprender cómo se siente una persona con este miedo tan paralizante. Millones de personas cogen vuelos cada día y parecen no tener ninguna preocupación, pero entre todas ellas, las hay que realmente sufren cada vez que embarcan. Se sienten como si estuvieran en “una jaula” de la que no pueden salir y que están a la completa merced de otras personas.

Esto tiene que ver, como comentábamos antes, con el miedo a perder el control.  A esta situación desesperante de sentirse en una jaula, se suma el miedo a los síntomas a los que ya se está predispuesto. Miedo a marearse, a sentir náuseas, ansiedad, taquicardias y miedo a que la situación se vaya de las manos y no pueda controlarse.

En estos casos, es muy recomendable comunicar la situación al personal del avión. Estas personas asisten en momentos de pánico por aviofobia muy a menudo y están preparadas y acostumbradas a tratarlos. Por ello, no dudes en decir cómo te sientes. También lo puedes comentar al pasajero que tengas al lado, probablemente su conversación y comprensión te ayude a sobrellevar la situación.

También sirve de gran ayuda ser conocedor de algunas técnicas de relajación, te aseguramos que te pueden evitar un mal trato y ayudarte cuando más lo necesites.  Previamente al vuelo, infórmate bien sobre el trayecto y, si puedes, elige tú el asiento que prefieras para volar. Al final, se trata de tener controladas todas las cosas que puedas, para rebajar esos niveles de ansiedad que provoca perder el control.

Acudir a un profesional es la única vía para superar por completo la aerofobia

“Nunca voy a coger un avión con normalidad”. Estas palabras se repiten una y otra vez en el cerebro de una persona con pánico a volar. El miedo es tan intenso que piensan que jamás van a superarlo y que su vida va a estar limitada para siempre. Saber cómo superar la aerofobia es el deseo más recurrente entre estas personas. La buena noticia es que si te pones en manos de un profesional especializado en fobias, tu problema se irá diluyendo poco a poco, con trabajo, dedicación y compromiso por tu parte.

En definitiva, la aerofobia está a la orden del día, por ello también existen cursos que pueden ayudarte a compartir experiencias con otros viajeros y especialistas del sector. Pedir ayuda es de valientes y es el mejor camino para desvincularte de tus miedos y finalmente sentirte libre.

Si no sabes como conseguir pacientes a través de Internet, esta guía te dará claridad.