“¿Qué me pasa? Ya no disfruto de las cosas que antes me resultaban agradables. Lo que antes me ilusionaba ahora ha dejado de hacerlo. Mi estado en estos momentos es de una apatía total en la que no me apetece hacer absolutamente nada.”
Tras leer este texto puede que pienses que lo que le ocurre a esa persona es que se encuentra apática, pero no, el término adecuado se llama anhedonia y muy pocas veces le prestamos la atención que se merece. Hoy vamos a ver el significado de abulia y anhedonia, además de su tratamiento y causas.
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¿Qué es la anhedonia?
Los síntomas de la anhedonia tienen que ver con la incapacidad de disfrutar de las cosas agradables que nos ofrece la vida. La imposibilidad de disfrutar y experimentar placer.
Mario Benedetti expresó en una de sus célebres frases: “A veces tengo la horrible sensación de que pasa el tiempo y no hago nada, y nada acontece, y nada me conmueve hasta la raíz”. Esta sería una manera resumida de definir este concepto.
Anhedonia parcial
La mayoría de las personas hemos pasado por algún momento en nuestras vidas en el que hemos dejado de sentir interés por aquello que antes nos ilusionaba o nos motivaba. ¡Cuidado! No hay que confundir esos momentos de pérdida de ilusión con este término. Quienes sufren anhedonia pierden el interés hasta el límite, siendo incapaces de disfrutar de aquellos pequeños instantes que antes les provocaban felicidad.
La anhedonia parcial es una designación que usamos cuando la pérdida de placer no ocurre por igual en todos los campos de la vida de la persona.
Por ejemplo, un caso de anhedonia parcial sería el que ocurre cuadno se pierde la capacidad de disfrutar o sentir mientras se mantienen relaciones sexuales.
¿Estamos ante un caso de depresión?
Es frecuente que ambos términos puedan confundirse ya que si nos encontramos ante un caso de anhedonia podemos observar que en la persona en cuestión no queda ni rastro de motivación o de aparente felicidad. No obstante y a pesar de que la anhedonia es uno de los síntomas de la depresión, es importante matizar que experimentar anhedonia no es sinónimo de sufrir depresión.
Sin embargo, no te asustes. Lo que no conocemos suele asustarnos y la anhedonia tiene tratamiento. Te hablaré de ello un poquito más adelante.
Libros para la depresión
Cuando el síntoma es parte de una depresión, es esta sobre la que es necesario intervenir.
Tanto la anhedonia, como la abulia o la depresión, requieren de tratamiento psicológico y/o farmacológico. Un libro no es sustituto de esta.
A continuación, voy a hacerte una recomendación de un libro que a mí parecer, es bastante bueno y puede leerse gratis a través de la plataforma de Kindle Unlimited.
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Uno de los síntomas de la anhedonia más característicos y frecuentes, es la pérdida de placer en cuanto a las relaciones sociales se refiere. Cuando dicha pérdida de placer únicamente atiende a la esfera socio afectiva, entonces hablamos de anhedonia social.
La anhedonia social se caracteriza por un componente conductual: dejar de acudir a eventos sociales, aislamiento, un cambio en el tipo de oció, étc, y por un componente cognitivo y emocional: “no disfruto estando con gente”, “la gente me aburre” o “no me apetece estar con nadie”.
Cuando esto sucede, suele ser como consecuencia de un burn out, es una reacción común en personas que trabajan cuidando a otras personas, de cara al publico o similar. No tiene porque ser indicador de un problema grave, pero sí de una señal de algo que se está deteriorando en nuestra área afectiva.
También puede ser la expresión del cansancio o agotamiento tras haber vivido situaciones de impotencia con seres queridos o repetidos conflictos.
Significado de abulia y anhedonia: diferencias
Abulia y anhedonia son dos términos que tienden a usarse indistintamente, sin embargo, aunque cueste apreciar la diferencia, no lo sinónimas:
¿Qué es la abulia?
La abulia es un síntoma característico de la depresión, pero también de otros trastornos y rasgos de personalidad. De hecho, algunos autores se plantean si la abulia no conforma en algunas personas, una parte de su forma de ser.
En psicología, cuando hablamos de abulia, hablamos de una alteración en el sistema conativo. Es decir, en la voluntad. La persona que padece de abulia, tiene una dificultad para tomar decisiones, y en general, para motivarse a la hora de llevar a cabo acciones.
En los estados más graves puede llegar a cursar con mutismo cinético o incluso estados de estupor como ocurre en la enfermedad de Blocq.
La escopolamina, o como popularmente la conocemos: Burundanga, provoca estados avanzados de abulia. La anulación de la voluntad, es lo que hace que la persona que la tome resulte tan fácilmente manipulable.
Tratamiento abulia
El tratamiento de la abulia va a depender en función del marco psicológico en el que se encuentre. Por ejemplo, no es lo mismo si la abulia es un síntoma de un trastorno disociativo, que una depresión o que un trastorno nerurológico.
En cualquier caso, el tratamiento más efectivo es el que comparte la terapia psicológica con la terapia farmacológica.
Abulia y apatía
La hipoabulia es considerada un síntoma similar a la apatía. Ambas, son características de varios trastornos psicológicos como el trastorno bipolar y los trastornos psicóticos.
Anhedonia y psicología: ¿Qué le ocurre a nuestro cerebro?
Actualmente se está investigando para tratar de buscar soluciones a esta problemática. A través de diferentes investigaciones y experimentos se ha relacionado una zona del cerebro conocida como corteza prefrontal media con los sistemas de recompensa. O dicho de otra manera, experimentamos placer cuando realizamos una actividad que para nosotros es satisfactoria o cuando llevamos a cabo nuestras necesidades vitales como comer o beber.
Pongamos un ejemplo: Cuando comemos nuestra comida favorita, por ejemplo el chocolate, en nuestro cerebro se activa un sistema de recompensa que provoca la liberación de una sustancia química denominada dopamina que se encarga de modular la actividad cerebral.
Según los últimos hallazgos, en aquellas personas que sufren anhedonia, la liberación de dopamina a diferentes zonas del cerebro puede verse privada o limitada. No obstante se trata de una amplia red de circuitos neuronales que es necesario investigar en profundidad.
No solo las personas que sufren depresión padecen anhedonia. Se ha observado que este síntoma también aparece en enfermedades como el alzhéimer o la esquizofrenia.
Anhedonia y alexitimia
La alexitimia es un trastorno psicológico que se caracteriza por una dificultad para ser capaces de indentificar y comprender las emociones (las propias y las ajenas).
En ocasiones, anhedonia y alexitimia van de la mano ya que si no somos capaces de entender nuestras motivaciones y deseos es muy complicado poder dirigirnos hacia ellos. Además, las personas alexitímicas suelen tener una emocionalidad plana, lo cual va en la misma línea de una persona que sufre anhedonia.
Tipos de anhedonia
Cada persona es un mundo y puede experimentar la pérdida de interés por unas u otras cosas. Se pueden diferenciar dos tipos de anhedonia: la anhedonia total y las anhedonias parciales.
En psicología podemos diferenciar entre anhedonia total, la cual se resume en una dificultad para experimentar placer en todos los ámbitos de la vida de la persona, mientras que en las anhedonias parciales se concreta en algunos ámbitos específicos. Dentro de las anhedonias parciales podemos encontrar dificultades a la hora de experimentar placer por ejemplo en el ámbito sexual, en el apetito o en actividades de ocio entre otros.
¿Anhedonia y apatía es lo mismo?
Ejemplos de Anhedonia
No, anhedonia y apatía no son lo mismo pero sí están relacionados. Por ejemplo:
Imaginemos el caso de Ana. Ana es una chica de 30 años, gran apasionada de la danza que siempre acude a clases de baile los martes y jueves por las tardes. Un día Ana manifiesta pereza y falta de interés a la hora de ir a sus clases, momento que para ella era tan gratificante. En este caso nos encontraríamos con un caso de apatía.
Siguiendo con el mismo ejemplo. Imaginemos que Ana ha perdido todo el interés por acudir a sus clases de baile. No quiere ir porque sabe que no va a experimentar el placer que antes la motivaba para ir semana tras semana. Aquí estaríamos hablando de un caso de anhedonia parcial (en caso de que no afecte a otras áreas de su vida).
El significado de la apatía emocional
La apatía se caracteriza por una falta de motivación o de ganas, debido a un sentimiento de desesperanza y falta de ilusión por las cosas.
La definición de apatía conlleva cierto grado de renuncia la vida, generalmente por falta de expectativas positivas. Es otro de los síntomas más característicos en la depresión y una de los motivos mas fuertes que bloquean esta, ya que la persona que la sufre necesita volver a lograr cosas para sentirse bien, pero la apatía le impide tener la esperanza de que eso pueda suceder.
Cuando decimos que una persona está apática o que tiene apatía emocional, lo que queremos señalar es que le cuesta sentir. En ocasiones hasta con las cosas negativas, cuando el grado de desconexión es grande.
A diferencia de la anhedonia, podríamos decir que la apatía se centra más en el futuro, mientras que la anhedonia lo hacer en mayor medida sobre el presente. En la apatía lo que se encuentra alterado es la imaginación, mientras que en el caso de la anhedonia la capacidad para sentir placer en lo momentos donde antes si que lo habríamos sentido.
¿Hay tratamiento para la anhedonia?
Si tras leer toda la información te has visto reflejado/a en estas líneas, ¡que no cunda el pánico!, por qué claro que la anhedonia tiene tratamiento.
Al final los síntomas reflejan situaciones internas que nos pasan, somos humanos y lo que nos caracteriza es sentir. La anhedonia es una llamada al cambio.
¿Cómo combatir la anhedonia?
El primer paso para mejorar esta situación es reconocer que tenemos un problema y queremos tomar medidas para revertir la situación. Es de vital importancia aprender a reconocer nuestras propias emociones, tanto las negativas como las positivas.
Debemos conocer las causas que motivan a la aparición de la anhedonia para de este modo aplicar el tratamiento adecuado. En este proceso la terapia psicológica es fundamental. Un psicólogo especializado puede ayudarnos a buscar aquellas cosas que sirvan como estímulo positivo en nuestras vidas.
Y recuerda lo que dijo Charles Chaplin: “Un día sin sonreír es un día perdido”.
¿Tratamiento natural para la anhedonia?
Si lo que estas buscando es un tratamiento natural para la anhedonia, te recomiendo este post donde te hablo sobre antidepresivos naturales.
Referencias bibliográficas:
Treadway, M. T., & Zald, D. H. (2011). Reconsidering anhedonia in depression: lessons from translational neuroscience. Neuroscience & Biobehavioral Reviews, 35(3), 537-555.
Olivares, J. M. (1995). Anhedonia: una revisión conceptual. Revista de la Asociación Española de Neuropsiquiatría., 15(52), 009-024.
Álvarez, M. P., & Montes, J. M. G. (2001). Tratamientos psicológicos eficaces para la depresión. Psicothema, 13(3), 493-510.