Pese a que podamos pensar que ser exigentes con nosotros mismos es algo que puede resultar positivo, lo cierto es que la autoexigencia excesiva es uno de los motivos de insatisfacción crónica e impotencia que más malestar causa en las personas.
En este artículo vamos a entender por qué sucede esto y cómo podemos bajar un poco el nivel de autoexigencia.
¿Qué significa ser una persona autoexigente?
No existe una definición unánime sobre qué es ser una persona autoexigente, ya que en todo esto, no deja de haber una connotación subjetiva. Lo que para mí puede ser un exceso de autoexigencia, para otra persona quizás no lo sea.
Para mí, tiene mas sentido hablar de autoexigencia realista. Por ejemplo, si yo lo que espero de mí es hacer siempre todo bien y tener éxito en cada objetivo que me propongo, seguramente acabaré sufriendo mucho cuando esto no se cumpla.
El problema principal, es que las personas que son excesivamente autoexigentes, ven esto en el fondo como una virtud, por lo que la resistencia al cambio suele ser grande pese al sufrimiento experimentado.
Autoexigencia vs perfeccionismo
El rasgo mas frecuente de las personas autoexigentes el perfeccionismo. Como te decía antes, podríamos pensar que ser perfeccionista es algo positivo, pero realmente no lo es.
Me viene a la mente el caso de unos de mis pacientes:
Se trata de Adrián (nombre inventado), un chico de 19 años que estudias periodismo. Adrián viene de un instituto pequeñito en un pueblo y recientemente se ha mudado a Madrid para estudiar un grado.
El estaba acostumbrado a ser uno de los mejores, si no el mejor, estudiante de su promoción. Sin embargo, aquí en Madrid, aunque sigue aprobando y sacando buenas notas, sus resultados no han sido tan brillantes como esperaba.
Su bloqueo ha sido tal, que en el momento en que comenzó a venir a consulta se sentía incapaz de escribir ningún trabajo para la universidad.
Al momento de sentarse a escribir frente al ordenador, se cuestionaba cada palabra que ponía, cuestionándose si era la más indicada. Experimentaba una constante sensación de duda e insatisfacción por cada cosa que hacía.
El problema del perfeccionismo es que es una ilusión, una falsa sensación de poder.
Autoexigencia vs autoestima
¿La autoexigencia y la autoestima se encuentran relacionadas?
Sí, pero quizás no como pensabas.
Contrario a lo que cabría pensar, tener una autoestima sana y una autoestima alta no es lo mismo. Mi paciente por ejemplo, tenía una opinión sobre valorada de sí mismo, que había construido durante años en base a sus capacidades intelectuales.
Sin embargo, al mudarse a la ciudad y entrar en contacto con sus “puntos débiles”, entro en crisis.
La autoestima sana es una autoestima estable. Para ello, necesitamos tener una integración de nuestras virtudes y carencias. La famosa aceptación de la que tanto hablamos los psicólogos es el mejor modo de trabajar la autoestima.
Este tipo de reacciones son muy frecuentes en adultos que han sido “niños trofeos”. Los “buenos estudiantes”, de los que sus padres estaban muy orgullosos. El problema es que suelen estar orgullos sólo por esto (o así lo expresan).
Por esta razón, en el momento que el exito se esfuma, se esfuma la identidad.
¿Es malo ponerse metas altas?
No, pero insisto, siempre y cuando estas metas altas partan de dos premisas:
- Que sean realistas
- Que sean flexibles
¿La autoexigencia genera ansiedad?
Recuerdo el caso de otro paciente, en este caso, era opositor a bombero. En su mente no cabía la posibilidad de que no la aprobase.
Esta genial luchar y persistir. Sin embargo, cuando afrontamos un reto de este tipo, en el tablero siempre debe estar la posibilidad de que no lo consigamos.
El sentía muchísima ansiedad ante la idea de no lograrlo, y paradójicamente, cuando estudiaba o hacia las pruebas físicas, le prestaba más atención a la idea de tener que hacerlo bien, que a lo que realmente tenía que hacer bien.
Algo que podría considerarte una forma de autosabotaje mental.
Ejercicios para la autoexigencia excesiva
¿Hay alguna manera de superar la autoexigencia excesiva?
Quiero ser claro en este punto, lo primero que debes tener en cuenta es que este es un post, y que ningún artículo por internet te va a dar las soluciones definitivas para absolutamente nada que tenga que ver con la salud mental.
Estos son, simplemente, algunos consejos o tips que te puede venir bien comenzar a trabajar:
- Regula tus expectativas: ¿Estas son realistas? ¿son flexibles?
- Pregúntate, ¿qué pasa si no lo consigo? ¿en qué pienso que me convierte esto?
- Abandona el pensamiento dicotómico: Soy lo mejor/soy lo peor.
- Construye una identidad más allá de lo que haces o consigues.
- Habla contigo y trátate como tratarías a tu hijo o hija si tuviera que por ejemplo, estudiar para un examen.