Una pequeña historia
Mi primera vez
Durante la carrera y sobre todo en el máster, me enseñaron qué es la depresión y como tratarla.
La verdad, es que sólo pude entender realmente hasta que conocí Raúl.
Rául (nombre inventado) fue el primer paciente que vi con depresión.
Después de trabajar con él durante varias sesiones, me di cuenta de primera mano, lo incapacitante y duro que puede llegar a ser este trastorno.
Entendí que no le tenía que animar. Tampoco pintarle las cosas bonitas ni forzarle a hacer planes sociales.
La depresión es como una camisa de fuerza que no podemos quitarnos. O mejor dicho, que no sabemos como hacerlo.
Intentar estar bien a toda costa, siguiendo con la metáfora, es agotarse en el intento frustrado por arrancarse dicha camisa.
Raúl me enseñó a esperar y a estar a su lado, hasta que yo pudiera enseñarle a él cómo encontrar los botones para poder desabrochar dicha camisa.
